Tomada en algún domingo mientras paseaba con Xeón, mi perro, por la casa.
No recuerdo muy bien los detalles de la toma. Simplemente íbamos caminando, vi el árbol y las nubes, me gustó, tomé la foto, y seguí adelante. Ya revisando las fotos en la computadora como que me gustó… y mucho… gritaba “blanco y negro”, así que seguí su consejo… y aunque a lo mejor no es ninguna foto maravillosa y nada por el estilo, algo tiene que me gusta mucho. Mucho.