Es complicado explicar lo que se siente aquí. Creo que pocas cosas nos preparan para la magnitud de este tipo de edificaciones. Había visto fotos de este Museo y su particular entrada en muchas ocasiones. Hasta películas! Pero aún así… venir caminando, ver la tierra del parque de enfrente (algo que me sorprendió muchísimo! todos los parques tienen tierra, y no algo menos… no sé… común? como me esperaba), los arbustos, y de pronto voltear a la izquierda y ver por primera vez, con mis ojos, este lugar.
El viaje a París fue estupendo. Por muchas y diversas razones. Un viaje de descubrimiento, en todos sentidos. Y así es como empezaba. Bueno, después de estar un rato batallando con el lenguaje (que francés no sé nada!).