Había pensado subir otra más de las de estrellas, pero creo que la que tenía no valía realmente la pena, no tenía nada de “especial”.
Parte del atractivo de este lugar (que se llama “Bajío de Venados”) es, precisamente, los venados. No son criaturas muy sociables, creo yo, y no nos tocó más que ver de lejos a alguno que otro. En la mañana, cuando salimos a pasear, estos 3 estaban muy cerca de la cabaña, y, aunque terminaron alejándose, se dejaron fotografiar por un momento. El Xeón no estaba muy tranquilo (casi siempre le ladra a cualquier animal que vea) y supongo que eso contribuyó a que no se quisieran quedar más (aunque empezaron a “huír” aún antes de ver/escuchar al Xeón y antes de que el Xeón los viera)
Escuchando: Nessun dorma – Puccini – Luciano Pavarotti